“Visualizar la infancia”
Documentar es elaborar una
narrativa a partir de la “mirada”. Documentar sin mirada es hacer un mural de
recuerdos, que puede ser muy emotivo, pero con poco carácter pedagógico.
Una documentación pedagógica a
partir de una mirada hacia el proceso es una buena pbase para una investigación
a partir de la práctica.
Ejemplo: observación del gesto y
la coreografía a partir de los juegos de construcciones. Se observó cómo los
niños iban construyendo de manera individual para después juntar maneras de
hacer y llegar a una construcción conjunta e individual a la vez.
La documentación es una manera
de reivindicar al “niño”. A veces nos ponemos a formular objetivos de manera
aparentemente incansable, hablando mucho de los niños y de su autonomía a la
vez que no miramos al niño con el suficiente detenimiento. Hay un artículo en
“La contra” de la Vanguardia donde se expone la paradoja que supone hablar de
la preparación para los próximos 50 años sin tener claro qué pasará el próximo
lustro.
Sin un contexto adecuado de
aprendizaje, no se puede generar documentación. Con un buen contexto de
aprendizaje no haría falta mirar objetivos.
A partir de un contexto,
situación, materiales iniciales... de aprendizaje, hablamos de una
documentación que:
- Se interesa por las acciones
libres de los niños (chaquetas, construcciones, cremalleras...)
- Da a estas acciones identidad y
revela una imagen de infancia (niño que camina siguiendo con los dedos el
espacio de la pared, llegando a mimetizarse con ella, niñas dando vueltas y
mirando la falda...). ¡Cuidado con la documentación/publicidad!
- Requiere una determinada actitud
en la escucha, en el pararse, en la percepción... una determinada presencia que
acoge y atiende una determinada mirada. (“Acojo”, no “recojo”, atiendo lo que
me llega como necesidad).
- Observa las necesidades (puede
que tengan que ver con lo que molesta más al educador). “¿Dónde están las
necesidades?” “¿Qué me molesta?”. (Ocurre a menudo en niños con TDH. El dilema
con los niños que tienen esta condición viene dado por el enfrentamiento entre
las necesidades y los contextos escolares cada vez más cerrados. Meritxell
Bonás hace referencia aquí a la niña que tenía TDH, cuando aun no existían
estas etiquetas, y que acabó como coreografa).
- Permite hacer público aquello
que pasa y lo pone al abasto del contraste (familias, niños que se pintan la
cara para dar miedo y al final se ven a los niños haciendo lo mismo...).
- Es una práctica cargada de
subjetividad. “Qué puedo decir de una persona dejando que ella sea”, sin invadirla, desde el
rigor... ¿cómo hago para no juzgar? El lenguaje es más importante de lo que
parece: por ejemplo no es lo mismo decir “me llega esto de este niño”
(distancia, desvinculación emocional, sin juzgar...), que “este niño es así”.
- Es un intento de comprender,
pero es un intento paradójico, porque nunca podremos abarcar al niño como
conocimiento. “¡Poner un pie de foto es más complicado de lo que parece!” .
- Se basa en el respeto, pero ¿qué
quiere decir ser respetuosos? ¿o qué es un contexto respetuoso?
o
Un
contexto que no provoque una exigencia o un reto es un contexto donde no pasará
nada, es decir, un contexto irrespetuoso.
o
Si
no dejamos que un niño asuma riesgos no estamos siendo respetuosos.
o
Un
contexto respetuoso ofrece una “variabilidad familiar”, es decir, unos
materiales o herramientas, que siendo las mismas pueden generar diferentes
posibilidades (de movimiento, de relación, de experimentación, de
expresión...). Una persona para llegar a ser creativa debe tener un contexto
fijo que le permita “jugar”, que le permita volver atrás y reformular ideas.
Ejemplo: una misma herramienta informática, el programa Audacity, puede servir
para generar diferentes posibilidades, es un contexto con variabilidad
familiar.
- Requiere de un determinado
entorno, libre y rico en relaciones.
- Es una práctica amorosa:
recoges, elaboras y retornas.
- Requiere estar a la espera sin
forzar (¡complicado en el entorno escolar!).
Meritxell Bonàs prefiere la
fotografía al vídeo: “te obliga a seleccionar antes”, desarrolla la
“previsión”, te hace estar a la espera, a la escucha... te hace estar presente.
(Personalmente pienso que el vídeo, el buen vídeo, también requiere todas estas
habilidades).
Ejemplo de foto: niño mirando su
mano pintada, transmormada. “La mirada de la mirada”.
Algunos “truquillos”:
1.
Preparar
los materiales y el contexto.
2.
Mirar
“cómo salta” un niño, cómo no salta otro, cómo saltan todos...”
3.
Captar
manos, gestos, frustraciones, diálogos corporales...
4.
Buscar
la poética, la metáfora.
5.
Construir
una narrativa... ¿a quién va dirigida?
“Por qué planteo un mundo de
actividades si el aprendizaje está cuando me doy la vuelta”
Teresa Godall