Montse Anton y Josep Rota. Formación corporal (7)

Propuestas:

-      Jugar con una pelota individualmente sin botarla.

-      Lanzar pelotas a los pies de los demás.

-      Inventar un juego improvisado en gran grupo.

-      Caminar con los ojos cerrados, parando como una estatua a la señal indicada y formando figuras simétricas, antisimétricas, creativas...

-      “Paquetes” (por número de personas, por características...).

-      Mímica en grupos de 7, desarrollando una historia a partir de la misma.

-      Masajes por parejas.

Representación escrita de emociones y sentimientos a partir de lo que se ha experimentado.

Siento personas que son próximas a mi, cercanía, amor, ganas de compartir, complicidad. He sentido placer y diversión durante los juegos, sobre todo con los de mímica, la espontaneidad en grupo ha surgido de manera muy natural, en un momento dado han aparecido la “muerte y los zombis” y había personas que realmente tenían miedo dentro del juego (sin dejar de divertirse).

Otras impresiones mías y de los demás.

-      En el momento de los masajes he sentido el tono muscular de Ana, bastante activo.

-      Hoy he tenido una interacción mayor con los otros dos chicos del grupo, normalmente noto cierto pudor entre nosotros, sobre todo entre yo y ellos dos, ya que ellos son amigos desde hace tiempo y tienen mucha confianza el uno con el otro.

-      Según los profesores, la sesión de hoy ha estado centrada en el cuerpo del otro, para focalizar la atención y la capacidad de escucha, y de esta manera preparar la observación de la sesión del sábado.

-      Si percibimos al otro, nos percibimos a nosotros mismos.

Relación con el objeto.

-      “Prolongación”: el objeto es un instrumento de propioceptividad, un instrumento para mirar hacia adentro y tener conciencia de la estructura muscular.

-      Contención: se ha trabajado con la pulsión de agresividad pero de una manera muy pautada mediante las consignas, para favorecer el movimiento, la emoción y la relación con el otro.

De los juegos individuales a los juegos en grupos de individuos.

Se ha trabajado así para enriquecer posturas, figuras... todo de manera progresiva para que el otro pueda identificar lo que yo hago y podamos jugar a “como si”, jugar simbólicamente. La función del psicomotricista ha sido la de “reconocimiento-espejo”. Han habido grandes comunicaciones a través de la mímica.

...

Hemos trabajado la plasticidad corporal, la escucha, la mirada hacia el otro, el diálogo tónico entre los dos... la actitud corporal en definitiva.

Ha habido un trabajo concienzudo de aseguración por parte de la Montse, abarcando el espacio y modificando las consignas según iba sintiendo lo que pasaba.